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El cacereño se mantiene a raya de los líderes con una jornada en la que fue de menos a más. Foto: @AsianTour
Comenzó en Pretoria el Tshwane Open para los cinco representantes de la Armada que inician en el país africano la segunda y última etapa momentánea del circuito europeo en este continente. Y podríamos decir sin miedo a equivocarnos que todo marcha a pedir de boca para los nuestros –incluso no habría que descartar que se consiguiera el segundo pleno del año, con todos los jugadores nacionales pasando a la lucha por el título del fin de semana-.
Y entre todos ellos destaca la figura del cacereño Jorge Campillo (67 golpes, -4), que con cuatro golpes por debajo del par se ha encaramado al Top 10 y se encuentra a solo dos impactos del triunvirato que conforman Grégory Havret (65 golpes, -6), Haydn Porteous (65 golpes, -6) y Alexander Björk (65 golpes, -6), líderes del evento tras los primeros 18 hoyos.
El extremeño comenzó la jornada activo en los greenes, intercalando buenos hoyos –el 13 sin ir más lejos, donde logró el birdie- con otros con no tan buen resultado –el 13 y el 14, de donde salió con sendos bogeys-. Pero hasta aquí llegaron los errores. Desde que se puso sobre par Campillo funcionó como un reloj suizo y con cinco birdies se ha situado en la zona noble de la tabla.
Algo similar ha vivido el barcelonés Pep Anglés (68 golpes, -3), que sigue haciendo méritos más que suficientes para ser tenido muy en cuenta a la hora de renovar la tarjeta. El joven jugador catalán, que inició su ronda por la primera bandera del Pretoria CC, fue completamente de menos a más con el paso de los minutos y el doloroso doblebogey del 3 tuvo una gran respuesta en los once hoyos finales, donde firmó cinco birdies sin errores para poner el -3 en su cartulina y marcharse a Casa Club en el puesto 16 y con el corte enfilado.
Adrián Otaegui (70 golpes, -1) y Nacho Elvira (70 golpes, -1), con dos rondas prácticamente calcadas ven cerca el primer gran objetivo de la semana mientras que Eduardo de la Riva (73 golpes, +2), con un fatal inicio de tres bogeys en sus tres primeras banderas, se ha complicado en exceso y necesitará remontar el viernes para estar junto a los mejores.
