Solo tuvieron que transcurrir dos golpes para cambiar el estado de ánimo de Charley Hoffman. Y es que al estadounidense se le vino el mundo encima cuando falló su golpe desde el tee del 18 poniendo en peligro su liderato. Sin embargo tras una buena recuperación, pero sobre todo con un estratosférico putt, a la postre elegido el mejor golpe del día, que le devolvía a lo más alto y con ello la felicidad. Y es que señoras y señores… ¡esto es Golf… a veces!
From frustration to elation.
That’s golf. (Sometimes.) pic.twitter.com/Ui6udVvtm5
— PGA TOUR (@PGATOUR) 19 de marzo de 2017





