El Golf no es ajeno a los cuentos de hadas que suelen darse de vez en cuando en el mundo del deporte y este sábado asistimos a uno durante varias horas. Y es que el norteamericano Tain Lee (Hoyo 17, -6) dominó el campeonato durante muchos minutos. ¿Y qué tiene esto de especial? Se preguntarán. Pues que este desconocido jugador estuvo al frente de la prueba desde el número 1882 del ranking. Dicho de otro modo: el golfista de las barras y estrellas se presentó en la primera plaza del Congaree GC sin ningún punto en la clasificación mundial.
Sin embargo, y a pesar del prometedor inicio de Lee con cuatro birdies en los cinco primeros hoyos, un desacertado final con dos bogeys y dos doblebogeys en los cinco últimos hoyos disputados le hicieron despertar del sueño y desde ese momento presenció desde la parte final del Top 10 cómo Chesson Hadley (Hoyo 17, -14) se iba despegando cada vez más de todos sus rivales. Y no es que la vuelta del campeón del Puerto Rico Open de 2014 fuera una locura en sus inicios -de hecho, fue bastante mala con un bogey y diez pares en sus once primeros hoyos-, pero un arreón en la parte final le dio el chute de adrenalina que necesitaba.
Hadley consiguió cuatro birdies en sus seis últimas banderas -la última no la pudo disputar por culpa de la climatología– para tomar un cómodo colchón de golpes con respecto a Harris English (Hoyo 17, -10) y, sobre todo, con el resto de los que aspiraban al triunfo este sábado. Entre ellos Dustin Johnson (Hoyo 17, -8), que vivió una vuelta con numerosos altibajos que le hizo perder el ritmo. De esta manera, el número 1 encara los diecinueve hoyos finales a seis golpes del líder. Ya nos ha demostrado en numerosas ocasiones que es capaz de lograr una ronda baja para volverle a comer la tostada a Hadley, pero veremos si es capaz de hacerlo tras unos meses en los que no ha rendido a su mejor nivel.