Seguro que en el comienzo idílico de 2021 que tenía planificado en su mente Justin Thomas no existían muchas de las cosas que le están sucediendo al norteamericano en las últimas semanas. Y es que, desde su participación en el Torneo de Campeones, el jugador de Louisville ha visto cómo parte de la opinión pública se le ha echado encima por un comentario desafortunado al fallar un putt, lo que le ha acabado repercutiendo en la pérdida de un importante patrocinador como Ralph Lauren y, como es entendible, una merma en su juego que dio como resultado la temprana eliminación en el Abu Dhabi HSBC Championship.
Poco importó que hace ahora una semana, en la previa del evento inaugural del curso en el European Tour, pidiera disculpas, se retractara y entonara el mea culpa ante decenas de periodistas del mundo entero. Thomas aceptó el castigo al que le había sometido Ralph Lauren -una marca que llevaba con él desde 2013, cuando dio el salto al mundo profesional- y lo único que esperaba es que el resto de firmas que lo acompañan alrededor del planeta creyeran sus palabras. “Prometo cambiar para que no vuelva a suceder”, llegó a pronunciar. Y sus plegarias han sido escuchadas.
Ha sido Citibank, quien decidió tomar aire y contar hasta diez antes de tomar una decisión en caliente de la que se pudieran arrepentir en un futuro. De hecho, no fue hasta este lunes cuando la empresa del sector de finanzas y seguros hizo público un comunicado en el que explicaba con detalle por qué había optado por darle una segunda oportunidad al número tres del mundo. “En todo este tiempo, la opción de terminar la relación siempre ha estado sobre la mesa”, empieza afirmando el duro escrito publicado en su página web.
“Hubiéramos enviado un mensaje claro e importante, porque las palabras utilizadas cruzaron una línea más allá de lo ofensivo. Sin embargo, hemos decidido aprovechar este momento para trabajar junto a Justin y tratar de generar un cambio”, sentenció la misiva, que deja entrever que JT donará una parte significativa del dinero de su patrocinio de Citibank a organizaciones LGTBQ+ acordadas entre las partes. Una singular manera de tratar de erradicar este tipo de comportamientos de nuestra sociedad.