El jugador norirlandés departió durante unos minutos con un niño que vestía una camiseta en la que se podía leer, «¡Yo también me llamo Rory!»
Rory McIlroy se encontró con el pequeño Rory, un chaval que vio cumplido el sueño de estar con su ídolo, aunque no sabemos si era exactamente el sueño del pequeño o del padre el cual se manifestaba enganchado al golf y por ello había puesto los nombres a sus hijos de Rory y Ben, en honor a McIlroy y Hogan. El norirlandés estuvo durante unos minutos con el niño a quién obsequió con bolas y, como no, con un guante firmado por el campeón europeo. A buen seguro que el padre no durmió esa noche.
When Rory met @McIlroyRory ? pic.twitter.com/ABADOSvdPQ
— DellTechChampionship (@DellTechChamp) 31 de agosto de 2018





