Sin tempo para relajarse la rueda ha vuelto a girar en el mejor circuito del mundo. El Safeway Open es el pistoletazo de salida de una nueva temporada en el PGA Tour para la que, de momento, no contamos con presencia española. Y es que a la ausencia obligatoria de Gonzalo Fernández-Castaño –no logró los derechos de juego en las Finals y jugará este año en la segunda división del Golf estadounidense- se unen esta semana las de Jon Rahm, Sergio García y Rafa Cabrera-Bello, quienes todavía están recuperándose de los recientes PlayOff de la FedEx Cup.
Una decisión que han repetido un gran número de jugadores internacionales y que ha provocado que sean los locales los que llenen el campo… y las primeras plazas. Para que se hagan una idea, de los 23 mejores en este arranque de campeonato sobre la hierba del Silverado Resort and Spa North solo Emiliano Grillo (67 golpes, -5), Graham DeLaet (69 golpes, -3) y el rookie chino Xinjun Zhang (69 golpes, -3) han sido capaces de plantarles cara a los estadounidenses.
La tabla, plagada de barras y estrellas, se encuentra encabezada en estos primeros instantes por el trío formado por Brendan Steele (65 golpes, -7), Tyler Duncan (65 golpes, -7) y Tom Hoge (65 golpes, -7), quienes han rendido a las mil maravillas en los 18 hoyos. Y es que mientras que el primero y el segundo conseguían entregar una cartulina con seis birdies, un eagle y un único fallo, Hoge protagonizaba un final de vuelta espectacular con seis birdies en los ocho últimos hoyos para tomarle el pulso al evento y distanciarse en dos impactos del grupo perseguidor.
Phil Mickelson (69 golpes, -3), quien aparecía como el rostro visible de estos primeros compases de curso, se salvó después de lograr unas paupérrimas estadísticas con un 14 por ciento de calles cogidas desde el tee y, pese a que tampoco estuvo muy atinado en los greenes, su dominio con los hierros le valió para colocarse a rebufo del Top 10 y darse una gran oportunidad de asaltar la zona alta este viernes.