No estaba colocada en la mejor posición y, además, contaba con el inconveniente de que el palo podría engancharse en esa zona de rough, pero cuando un jugador tiene su día nada ni nadie es capaz de hacerle frente. Si no que se lo digan al norteamericano Doug Ghim, que en su debut en el Bermuda Championship llevó a cabo una de las rondas más espectaculares de todo el jueves finalizando con un siete bajo par -no conoció el error en el día- y dando la puntilla con este enorme chip en el 18.