Todo parecía perdido cuando la bola de Ken Duke aterrizó en el bunker de la derecha proveniente del semi-rough. “Desde ahí, si se deja una oportunidad decente de birdie puede darse con un canto en los dientes”, decían algunos. Sin embargo, el veterano jugador estadounidense obró la magia para conseguir el mejor golpe del día y a buen seguro que uno de los más grandes que se han visto en este mes de abril.
Desde una distancia de unos 23 metros, el norteamericano –que se encontraba en un punto en el que ni siquiera podía divisar la totalidad del green- ideó un golpe perfecto que encontró el desnivel justo para que la pelota cayera mansamente en el fondo del agujero. La celebración tras semejante eagle no es para menos.
The shot. The reaction. What a highlight.
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— PGA TOUR (@PGATOUR) 21 de abril de 2017