Por increíble que parezca Brooks Koepka no fue la persona que más sufrió el domingo con el agua en el AT&T Byron Nelson. Y no, no nos estamos refiriendo a que pudiera haber otro golfista que acabara con la bola en los terribles obstáculos del TPC Four Seasons Resort.
Hablamos de este aficionado, que tuvo la mala suerte de estrellar su coche de golf contra una boca de incendios en medio del complejo texano –con las posteriores consecuencias, claro está-. Como si de un parque acuático se tratara, la boca comenzó a expulsar agua, lo que hizo imposible por unos minutos sacar el vehículo de esa embarazosa situación.
Aunque lo que nos preguntamos todos es: ¿Cómo no pudo ver ese robusto objeto de color amarillo?
Some guy just crashed his golf cart into a fire hydrant at the #ByronNelson @PGATOUR pic.twitter.com/7gnX9BCJ4L
— Chris Loughman (@C_Liftoff21) 21 de mayo de 2016