Phil Mickelson no ha ganado nunca en el Memorial Tournament, ni siquiera se ha quedado segundo, pero eso no quita para que el genio de San Diego se conozca al dedillo los greenes de Muirfield Village. Una prueba de lo que decimos es su golpe en el hoyo 10 en la tercera jornada del Workday Charity Open, cuando jugó al centro y al fondo del green para que la caída del verde moviera la bola hasta dejarla muy cerca del hoyo. Un golpe con muchísima sabiduría.