Desde hace varias semanas, el escenario vivido entre el PGA Tour y el LIV Golf ha ido un paso más allá. El veto al que ha sometido el circuito norteamericano a todos aquellos miembros que han decidido formar parte de la gira saudí promovió una ola de protestas entre implicados y directivos del Tour de reciente creación. Tanto fue así que el propio Greg Norman hizo llegar a los golfistas un comunicado en el que les mostraba su total apoyo tanto personal como legal ante una decisión que tildaban de injusta.
De hecho, el propio Norman se atrevió a pronosticar entonces que el fallo adoptado por Jay Monahan llevaría aparejadas consecuencias legales para la gira estadounidense al considerar que estaban valiéndose de su posición global para perpetuar un monopolio en el sector. Dicho y hecho. En un reportaje publicado hace escasas horas por el Wall Street Journal, se informaba de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos está investigando al PGA Tour por indicios de un comportamiento anticompetitivo contra las LIV Golf Invitational Series.
La investigación se basa en la prohibición de los jugadores de participar en otras pruebas que tengan lugar fuera del PGA Tour sin el consentimiento previo de este, amén de las ya consabidas suspensiones sine die a jugadores de la talla de Brooks Koepka, Phil Mickelson, Bryson DeChambeau o Dustin Johnson, entre muchos otros. “Ya pasamos por esto en 1994 y confiamos en un resultado similar”, confirmó de manera breve un portavoz del PGA Tour al Wall Street Journal.
Una noticia que Greg Norman ha acogido de buen grado: “Es un ejemplo de la estupidez del PGA Tour”, afirmó Norman al Palm Beach Post. “En lugar de sentarse y buscar una solución conjunta, prefirieron hacer la guerra por su cuenta. Se lo han buscado ellos solos. Nosotros no hemos hecho otra cosa que construir un modelo de negocio y dar a los contratistas independientes la posibilidad de ganarse la vida haciendo otra cosa, además de seguir siendo miembros del PGA Tour. Nosotros buscamos coexistir con lo que ya hay. No somos partidarios de los vetos”, sentenció.
The Justice Department is investigating whether the PGA Tour engaged in anticompetitive actions as it battles the Saudi-backed LIV Golf league https://t.co/7YRBUx6d9Q
— The Wall Street Journal (@WSJ) July 12, 2022
Pingback: El PGA Tour se agarra al OWGR para hacer frente al LIV Golf