Incluso hasta un número uno del mundo comete errores propios de cualquier amateur de hándicap alto. Sucedió en el hoyo 3 del Trump National Doral cuando Adam Scott pateó desde el rough de tal forma que la bola cruzó completamente el green -más de 20 metros-, pasó el primer corte de hierba yendo a reposar a lo más profundo del rough por el otro lado.
Golf is hard.#QuickHits https://t.co/NFoHTuB3zv
— PGA TOUR (@PGATOUR) 4 de marzo de 2016





