Se las prometía muy felices Tiger Woods cuando, llegada la novena bandera de su vuelta por el campo norte, marchaba con un dos bajo par para colarse con todo merecimiento entre los 38 mejores del Farmers Insurance Open. Pero con lo que no contaba es con la peripecia que le iba a ocurrir en el 18, un par 4 que iba de lo más normal hasta su tercer golpe.
Y es que el californiano mandó la bola desde la calle directamente al bunker que se encontraba en la parte posterior del green dejando una estampa dantesca. La bola se incrustó tanto en la arena que le dejó poco margen de maniobra. El ex número 1 del mundo bastante hizo con sacarla del atolladero, pero una serie de catastróficas desdichas –corbata incluida- acabó influyendo en que el estadounidense se anotara un doblebogey en la cartulina.
Golf is hard.
A plugged lie leads to double bogey for Tiger Woods.
He’s now 1 outside the projected cut. #QuickHits pic.twitter.com/LWboM5uEE7
— PGA TOUR (@PGATOUR) January 25, 2019