Todavía no ha echado a andar la LPGA y ya hay numerosos torneos que se han visto obligados a cancelar su disputa hasta el año 2021. El último en sumarse a esta lista de la que forman parte eventos tan importantes como el Evian o el Dow Great Lakes Bay Invitational ha sido el CP Women’s Open, ubicado en un principio para jugarse del 3 al 6 de septiembre. El evento con sede en Vancouver (Canadá) se ha visto obligado a tomar la decisión después de las continuas restricciones de viajes y el cierre de fronteras provocados por el COVID-19, algo que ya nos suena bastante de otros torneos del PGA Tour y el European Tour.
“Entiendo que esta es una decisión difícil para todos los involucrados, pero dadas las restricciones a las que nos enfrentamos no podemos hacer otra cosa”, confesó en un comunicado de prensa el comisionado Mike Whan. “Es muy decepcionante perderse el abierto nacional canadiense y sé que hablo por todos los jugadores y el personal de la LPGA cuando digo que esperamos volver a Vancouver el próximo año”, sentenció el directivo.
Así pues, esta será la primera vez que se cancele el Open del país de la hoja de arce desde su fundación en 1973. Un evento que iba a disputarse este curso en la semana previa al ANA Inspiration y que cuenta con ganadoras ilustres en la última década como Lydia Ko -quien consiguió el triunfo con apenas 15 años cuando todavía era amateur para establecer el mayor registro de precocidad de una vencedora en la LPGA– o Brooke Henderson, que en 2018 se convirtió en la primera canadiense en llevarse a casa el galardón tras 45 años de historia del campeonato.
Eso por no hablar de la actual número 1 del mundo Jin Young Ko, vigente campeona después de llegar el año pasado hasta el 26 bajo par. Un campeonato que, si no pasa nada raro, podrá defender a partir del 26 de septiembre del próximo año. Mientras tanto, todo sigue preparado para que la acción se reanude el 31 de julio con el LPGA Drive On Championship.