El PGA Tour ha confirmado que cambiará su política sobre el ritmo de juego, normas que entrarán en vigor después del Masters y que estarán centradas en jugadores individuales. Para ello se creará una lista con los jugadores más lentos, aquellos que por norma tardan más de 45 segundos en golpear la bola, por lo que ya no será al grupo al que se ponga bajo el reloj.
La nueva política tiene como objetivo evitar situaciones como la sucedida en el pasado mes de agosto en The Northern Trust cuando Bryson DeChambeau se tomó más de dos minutos y medio para tirar un putt, unas imágenes que se convirtieron virales dando al vuelta al mundo.
«No estamos tratando de poner en la lista negra a nadie», dijo un jugador de la gira a GolfDigest bajo el anonimato, «pero será mucho más justo para la mayoría de los jugadores«. Los datos recopilados desde que en 2006 se implementara el ShotLink ayudará al Tour en su nueva política.
Esos datos indican que el 90 por ciento de los jugadores no tardan más de 39 segundos de media en ejecutar su golpe. «Entonces, si el 90 por ciento de nosotros lo hacemos bien, tendremos que trabajar en ese 10 por ciento», declaró otro miembro del Circuito también en el anonimato. El plan incluye la posibilidad de capacitar a los oficiales del Tour para que tomen medidas sancionadoras en el caso de que un jugador afecte el ritmo de juego.
El PGA Tour llevará a cabo un período de educación para sus miembros durante los primeros tres meses de 2020. La nueva política está programada para entrar en vigencia, salvo circunstancias imprevistas, a partir del 16 de abril en el RBC Heritage en Hilton Head, SC, la semana después del Masters. Un portavoz del Circuito anunció que la nueva política se dará a conocer a primeros de año.