De nuevo el circuito europeo ha vuelto a ser pionero de una iniciativa que se quiere implantar ahora en el PGA Tour: la de las entrevistas a los jugadores en mitad de las rondas. Y, al igual que ocurriera en la gira del viejo continente, el circuito americano se ha encontrado con posiciones enfrentadas entre los protagonistas. Que si tienen que ser respetuosos con el momento en que preguntan, que si no le traerán a uno más que inconvenientes, que si… En definitiva, que la medida comenzará a implantarse esta misma semana en el Torneo de Campeones y todavía desconocemos quién se ofrecerá a llevarla a la práctica.
El que seguro que no lo hará será Rory McIlroy que, en la previa del torneo que se disputará en el Plantation Course, ya ha dejado meridianamente claro que en el momento en que la gira se dirija a él -a estas horas todavía no lo ha hecho- transmitirá su negativa: “En Europa lo llevan haciendo ya un par de años y en todas las ocasiones en las que me han preguntado si estaba interesado en ofrecerme he contestado que no”.
Misma respuesta que le ha dado hace unas horas Justin Thomas, quien ya ha sido tentado por la organización para efectuar declaraciones en momentos puntuales de las dos primeras rondas -se ha descartado que las entrevistas tengan lugar durante los dos últimos días por motivos más que obvios-. “Mira, me acaban de preguntar hace unas horas y les he dicho que no. Ese momento es para mí. Yo hablo mucho conmigo mismo y me gusta que se respete ese espacio. Para mí no hay beneficio alguno. Es más, solo me va a hacer quedar peor”, senteció.
Afortunadamente no todos se han mostrado tan tajantes en sus declaraciones. Es el caso de Marc Leishman, que ya ha sido objeto de este tipo de entrevistas en los torneos que ha jugado en Australia y se muestra dispuesto a colaborar si con ello los espectadores se acercan más a este deporte: “Queremos atraer a cuanta más gente mejor y esto podría ser una manera de conseguirlo”.