“Es una bestia competitiva. Todo lo que hace es apretar el pedal del acelerador y no soltarlo hasta el final del torneo”, llegó a comentar a los periodistas Rory McIlroy en referencia a Viktor Hovland. Y es que, para quien no conociera todavía al noruego, los PlayOff de la FedEx Cup han supuesto un antes y un después a la hora de entender el juego del deportista nórdico, que este año ha logrado triunfos en el Memorial y en los recientes BMW Championship y Tour Championship.
Unas victorias que no pueden explicarse sin las continuas ganas de mejorar y el excelso trabajo que hay detrás, tal y como se ha encargado de comentar Joe Mayo, su entrenador de swing desde el pasado mes de enero. “Es sorprendente que un jugador pueda ganar un torneo -en alusión al último Hero World Challenge- y no estar contento consigo mismo”, reconoció el instructor, conocido en los círculos cercanos al Golf como uno de los profesionales más competentes en su trabajo.
“Si algo tiene Viktor es que nunca va a permitir que un instructor arruine su trabajo y donde otros ven en un triunfo una posible huida hacia adelante, él reconoce cuándo deben producirse los cambios. Tiene un radar”, afirmó Mayo, quien tiene muy claro que con el nivel que está manteniendo en estos momentos será muy difícil batirlo. “La gente dice que tiene un Golf aburrido, pero estoy convencido de que si continúa con ese Golf aburrido será complicado ganarle”, añadió.
Palabras que el propio Hovland se encargó de matizar tras su victoria en East Lake: “Soy muy duro conmigo mismo y hasta hace poco no creía en mí, aunque tuviera el juego para competir. Esto lo he ido mejorando con el paso del tiempo y creo que ahora dispongo de la pieza que me faltaba”, sentenció.
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— PGA TOUR (@PGATOUR) August 28, 2023