El pro del Web.com Greg Eason se fue hasta los 42 sobre par en 36 hoyos… ¡y encima perdió 32 bolas!

El profesional inglés, de récord en Bahamas tras el inicio del curso en el circuito. Foto: @WebdotcomTour

The Bahamas Great Exuma Classic, el torneo con el que arrancaba este pasado domingo la nueva temporada de Web.com no ha dejado de sorprendernos durante las últimas 48 horas. Y es que la lluvia y las increíbles rachas de viento de las que estamos siendo testigos en la isla caribeña han provocado un campeonato sin precedentes en el segundo circuito más importante de todo Estados Unidos. Para mal, queremos decir. Y es que en pocas ocasiones nos vamos a encontrar una tabla clasificatoria con unos guarismos tan altos mientras avanzamos por la parte final de la tercera jornada –en teoría deberían haberla terminado ya, pero la climatología no ha puesto de su parte-.

Para que se hagan una idea. El estadounidense Nicolas Thompon, líder en Casa Club, es el único jugador de los 67 que continúan en competición con números en negativo. Dos bajo par concretamente. Y, como imaginarán, cuanto más bajamos la vista la desolación se hace más y más palpable.  Si no que se lo digan al inglés Greg Eason, que se ha ganado el cariño de todos los aficionados a este deporte al otro lado del charco después de haber batido un récord que tardaremos mucho tiempo en volver a ver sobrepasar en el golf profesional: se fue durante los dos primeros días de torneo por encima de los 90 golpes.

91 y 95 golpes concretamente para un 42 por encima del par. Estas fueron las cartulinas entregadas por el británico sobre la hierba del Emerald Reed Course. Una auténtica barbaridad que a continuación les pasamos a detallar. En 36 hoyos, Eason logró la “proeza” de sumar 8 bogeys, 4 doblebogeys, 2 triplebogeys, 2 cuádruplebogeys,  2 quíntuplebogeys y tan solo dos birdies, un resultado que, pese a lo desastroso, no le ha hecho perder el humor –ni siquiera después de confirmar que ha perdido 32 bolas por el camino-. Y es que una mala semana la tiene cualquiera… ¡sobre todo si se juega con rachas de viento por encima de los 64 kilómetros por hora!