Espectacular final de los nueve primeros hoyos que experimentó Tiger Woods en la segunda jornada del Masters de Augusta. Y es que el californiano encontró su momento con un juego de campanillas llevado en volandas por los miles de aficionados que se encontraban siguiendo su ronda este viernes. Todo ello gracias al escandaloso putt desde once metros que embocó con el que no le quedó más remedio que sacar el puño.