No es la primera vez que el país otomano es sacudido por un ataque terrorista. Turquía lleva unos meses movidos en cuanto al tema de la seguridad y el circuito europeo no podía a ser ajeno a todo esto –y más con el primer evento de las Final Series a la vuelta de la esquina-. El Turkish Airlines Open, que se disputará durante la primera semana de noviembre en el Regnum Carya Golf & Spa Resort de Antalya tuvo la pasada semana su primer contratiempo –y no hablamos de la ausencia ya confirmada de Tiger Woods-. Y es que un centro turístico de las inmediaciones del complejo fue atacado por misiles desde una zona montañosa.
Todavía se desconocen los detalles sobre quién pudo llevar a cabo la acción terrorista, pero no se descarta ni al PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistán) ni al Estado Islámico como los posibles autores materiales de los ataques. Según los primeros datos, los misiles no tenían como objetivo a la población civil, sino un buque cisterna de combustible. Sin embargo, éstos acabaron golpeando un almacén de las inmediaciones, instalando el pánico entre la población.
Desde el momento en el que se dio a conocer la noticia, la organización del European Tour está trabajando sin descanso para probar si es o no conveniente seguir con la celebración del torneo, pues la seguridad de los jugadores y aficionados es lo más importante en este tipo de casos. “Como cuestión de prioridad, estamos investigando el incidente que tuvo lugar el pasado viernes 14 de octubre en la región de Antalya con nuestros asesores y con las autoridades locales. De momento no podemos suministrar más información, pero la actualizaremos en el momento que nos sea posible”, admitió uno de los portavoces del circuito.
Así pues, tocará esperar unos días para conocer si el primer evento de la postemporada puede seguir con sus preparativos.
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