Ya lo decía Sergio García antes de que diera comienzo la competición: «Creo que una o dos bajo par cada día, será un buen resultado», pues bien, en el ecuador de la prueba vemos que sus vaticinios no andaban lejos ya que tan solo dos jugadores, Pablo Larrazábal y Andrew Johnston han conseguido restar golpes al Real Club Valderrama.
Y es que 17 de los 18 hoyos se jugaron por encima del par mostrándose el 16 (par 4) como el más duro de todos ellos. Ese 16 se jugó con una media de 4,72 anotándose apenas 5 birdies, 59 pares, 52 bogeys y 25 doblebogeys o peor.
Solo el par 5 del 11 se jugó por debajo de su par pero fue prácticamente por la mínima ya que acabó con una media de 4,94. Pobre bagaje si tenemos en cuenta que la inmensa mayoría de los jugadores juegan su segundo tiro a green.
Pero aquí no se acaba esto, las previsiones para la jornada del sábado dicen que el viento continuará realizando su trabajo ya que se esperan ráfagas de más de 30 kilómetros hora siendo las dos de la tarde su momento más álgido. Estaremos, por lo tanto, muy atentos a esa evolución al juego y a los marcadores.