La última vez que el PGA Tour tuvo que suspender el juego en un torneo incluido en su calendario por fuertes vientos fue en el Open de 2015
El PGA Tour se vio obligado a suspender el juego cuatro horas durante la tercera ronda del Genesis Invitational después de que el fuerte viento actuara en el Riviera CC y en particular en sus greenes sacando la bola de ellos mientras se pateaba y moviéndolas cuando los jugadores se encontraban leyendo las caídas, tal y como muestran las imágenes que les ofrecemos.
Todos menos el partido estelar de Sam Burns, Tyler McCumber y Jason Kokrak habían comenzado la penúltima jornada antes de que se tomara la decisión de detener la competición cuando las ráfagas se acercaban a los 60 kilómetros por hora, una situación insostenible dada la naturaleza dura y rápida de los greenes del complejo californiano.
«Se hizo lo mejor que se puede hacer aquí, estos greenes son prácticamente injugables con este tipo de viento«, dijo el capitán internacional de la Presidents Cup, Trevor Immelman, a Golf Channel.
La última vez que el PGA Tour tuvo que suspender el juego en un torneo incluido en su calendario por fuertes vientos fue en el Open Championship de 2015 en St. Andrews lejos de tierras americanas, mientras que en territorio estadounidense ocurría en el AT&T Pebble Beach Pro-Am de 2014.
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