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El León de Barrika luchará el domingo por su 5ª victoria en los últimos 16 meses. Foto: @OpenGolf
Abróchense los cinturones porque este domingo viviremos una jornada apasionante en el Open de España 2018. Y es que la Armada luchará por conseguir otra victoria más en el presente curso después de una jornada del movimiento que si ha provocado algo es que las cosas se estrechen por la parte de arriba de la tabla, con el irlandés Paul Dunne (68 golpes, -17) liderando con una renta exigua respecto a los dos españoles que se han situado por méritos propios en el podio del evento.
Estos no son otros que Nacho Elvira (66 golpes, -16) y Jon Rahm (66 golpes, -15), quienes han sido mejores que el británico y le han echado el lazo en la tabla con dos grandes rondas que les permitirán salir en los últimos encuentros del día para tratar de arrebatarle a “Beef” Johnston el título del torneo. De hecho, el cántabro y el vizcaíno clavaron guarismos, aunque de forma diferente.
Mientras que el primero consiguió ocho birdies para contrarrestar los dos bogeys cosechados en el 4 y en el 17, el León de Barrika -demasiado obsesionado en algunas ocasiones con tratar de encontrarle explicación a algunos de sus fallos- conseguía siete aciertos después de solo claudicar ante el par 3 del hoyo 14 -fue el tercer error en 54 banderas del número 4 del mundo-. Esta fue de largo la bandera más complicada del recorrido, jugándose en 3,16 y logrando que solo cuatro jugadores salieran con el birdie bajo el brazo.
Dos grandes vueltas de las que se quedaron muy cerca Jorge Campillo (67 golpes, -12) -el cacereño se ha metido séptimo y tiene a tiro de piedra seguir escalando lugares en la clasificación- y el madrileño Pedro Oriol (67 golpes, -10), quien continúa demostrando su idilio con este campo después de entregar la segunda tarjeta por debajo de los 70 impactos para instalarse en el T14.
En cuanto al Challenge Tour, Borja Virto (76 golpes, +6) -quien se llegó a colocar colíder durante las primeras horas del Belt and Road Colorful Yunnan Open chino- volvió a entregar una cartulina repleta de errores y se queda en el T51, muy lejos de los puestos delanteros de la tabla.
