Agárrense, que vienen curvas en estos últimos 18 hoyos del Sony Open que está teniendo lugar en la paradisíaca isla de Oahu -y no nos referimos solo a la falsa alarma que se dio a la población por ataques con misiles balísticos-. Y es que el torneo está al rojo vivo, con hasta trece jugadores luchando por la victoria y con un nuevo líder tras el desplome de Brian Harman (68 golpes -15). Se trata de Tom Hoge (64 golpes, -16), que ha cuajado una ronda sin sobresaltos para subirse al primer escalón del podio.
El joven jugador de Carolina del Norte entregó una cartulina libre de fallos con seis birdies que le ha permitido adelantar a su compatriota en lo alto de la tabla. Pero más allá del resultado, hay que tener mucho ojo con su descaro a la hora de afrontar la parte caliente del torneo, sorteando las dificultades y, pese a no mostrar grandes números en cuento a calles cogidas, solucionándolo con una auténtica exhibición con los hierros en las manos.
Hoge administró a la perfección los tiempos y tres birdies en la primera parte del recorrido y otros tres en la segunda le facilitan marchar con un golpe de ventaja respecto a Patton Kizzire, al que solo un doblebogey en su primera bandera de la jornada del movimiento -tuvo que hacer frente a una penalización nada más arrancar su vuelta- le desbarató los planes de ascender a lo más alto. Y es que este fue el único fallo de Kizzire, que poco después consiguió cuatro birdies consecutivos antes de terminar la primera vuelta y le añadió picante con cuatro más en los segundos nueve hoyos para convertirse en uno de los jugadores a tener en cuenta de cara al domingo.
Tampoco podemos olvidarnos de Justin Thomas (66 golpes, -10) quien, poco a poco, ya ha conseguido colarse entre los nueve mejores del torneo y ya aparece a solo seis golpes del líder. Nada que “Mr. 59” no pueda solventar.