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El complejo nipón aguarda paciente a la decisión sobre sus participantes. Foto: @ManzanSimizu
Desde que se produjo la total paralización de las competiciones más importante en el mundo del Golf, una pregunta empezó a cobrar protagonismo: si esto se prolonga a lo largo de las semanas, ¿qué pasará con el ranking? ¿Se tomará la clasificación mundial un descanso del mismo modo que lo hacen las giras de, prácticamente, el mundo entero? Lo cierto es que a fecha de hoy no tenemos respuesta a esta duda –desde los altos estamentos se llegó a comentar que estaban estudiando diferentes posibilidades- y lo único cierto es que los jugadores seguirán subiendo y bajando hasta que se le dé una solución al tema.
El porqué es bastante simple. Entre las múltiples variables y algoritmos que utiliza semanalmente el ranking, existe uno –al igual que hay otro que configura los puntos que recibe cada evento en función de la “fuerza del field”- que va “restándole importancia” a las actuaciones en función del tiempo que ha pasado desde la misma. De este modo, se premia siempre el estado de forma de los últimos tiempos –la victoria de Jorge Campillo en Qatar, que le reportó 24 puntos, ya vale más a estas alturas que el Tour Championship conseguido por Tiger en 2018, que en estos momentos le sirve para sumar 18,2 puntos-.
Así se encuentran los Tours más importantes del mundo en este momento (Actualizado a 18.03.20)
Es por esto que, aunque ya se ha confirmado que no habrá Golf en las cuatro próximas semanas, seguirá habiendo variaciones ente los jugadores a tenor de lo que acabamos de comentar. Algo fundamental que tiene especial trascendencia para la clasificación olímpica –cabe recordar que los jugadores irán a Tokio en función del ranking a fecha 22 de junio de 2020-. Aunque no sólo para la cita en Kasumigaseki hemos de darle un vistazo a la lista. Existen torneos para los que tener cierto estatus en el ranking da la posibilidad de acudir a él.
Es el caso del US Open, para el que vale la pena estar en el Top 60 cuatro semanas antes del evento para no depender de los clasificatorios de esa misma semana. Una plaza en la que, siguiendo la evolución que nos deparará la clasificación sin torneos que disputar, no estará por ejemplo Phil Mickelson, que en la actualidad ocupa el 61er lugar. Un escenario inédito al que sólo la intervención por parte de sus responsables podría poner remedio.
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