Justo cuando parecía que Ian Poulter se iría a dormir como líder en solitario vino uno de los golpes innombrables en el mundo del golf: el fatídico shank o socket.
Poulter llegaba al tee del 5 como líder pero una falta de concentración, según dijo el propio jugador a su hijo Lucas, motivaba el error enviando la bola al agua después de que botara en un camino de asfalto.
Resultado: doblebogey y cabreo del jugador que saldría del seis con otro error en forma de bogey. «Fue una falta de concentración. Traté de jugar un hierro 8 y pegué un hermoso shank«, dijo Poulter sobre el error del hoyo 5. «Yo estaba muy enojado. Y cuando estoy así, obviamente, mi ritmo cardíaco sube ligeramente y lo que hay que hacer es dar una patada a la adrenalina. Así que el tiro en el 6 fue causado por la adrenalina, porque estaba cabreado».





