Mientras Miguel Ángel Jiménez celebraba su triunfo otro jugador, el joven belga Thomas Pieters, se lamentaba de la corbata de casi 360º que le hizo la bola con su putt desde menos de dos metros eliminándolo de la lucha por el título.

Mientras Miguel Ángel Jiménez celebraba su triunfo otro jugador, el joven belga Thomas Pieters, se lamentaba de la corbata de casi 360º que le hizo la bola con su putt desde menos de dos metros eliminándolo de la lucha por el título.





