Después de conocer qué jugadores van a ocupar el Top 100 mundial con la entrada del nuevo año, vamos a detenernos en desgranar un poco algunas de las estadísticas más curiosas que nos ha dejado la clasificación en el curso más extraño que ha vivido el Golf desde que tenemos uso de razón. Una temporada que nos ha dejado a DJ en lo más alto gracias a su enorme sprint final y que le permite sumar con ésta 110 semanas con el cetro de rey de este deporte -sólo es superado en este apartado por Tiger Woods y Greg Norman-. Sin embargo, y aunque cueste de creer, sólo es la segunda ocasión en la que el norteamericano llega al 31 de diciembre en esta posición.
Como sorprendente también es que en el Top 20 nos encontremos con cero jugadores por encima de los 37 años, mientras que hace justo un año ese número era de 6 con Tiger Woods, Justin Rose, Adam Scott, Paul Casey, Francesco Molinari y Louis Oosthuizen. Un auge de la juventud que ha venido predeterminado por ascensos como el de Collin Morikawa, que se impuso en el PGA Championship para llevarse el mayor bote de puntos de cara al ranking de toda la temporada con 899. El segundo fue el US Open que ganó Bryson DeChambeau con 873 y el tercero el Memorial en el que venció Jon Rahm con 803.
Esto ha favorecido también que 14 golfistas que se encontraban fuera del Top 50 mundial a finales de 2019 se hicieran hueco en estas posiciones en tan sólo doce meses, con Shugo Imahira -del 31 al 76– y Henrik Stenson -del 26 al 65– como los golfistas que más han caído en este tiempo en la tabla. Un descenso que también ha sufrido un Tiger que ha pasado de la sexta plaza a la 41ª que ocupa en la actualidad. Esta es la sexta ocasión en su carrera que termina el año fuera del Top 25 pero, eso sí, con esta es la vigesimosegunda vez en un cuarto de siglo que el californiano termina entre los 50 mejores. De locos.