Fue el tiro definitivo del vasco, ocurría en el tee del hoyo 13 del Stadium Course en La Quinta –California-. Jon Rahm conectaba el mejor golpe de la jornada, un golpazo desde 192 metros con el que dejaba la bola dada para anotar el cuarto birdie del día, situarse en lo más alto de la tabla y clave para sumar su segundo título en el PGA Tour. Sin palabras.