Las estadounidenses toman una ventaja de tres puntos con todavía 20 por delante. Sin embargo, las sensaciones no son positivas para el viejo continente
Todavía falta un mundo, pero derrotas así cuando todo parecía controlado duelen mucho. El conjunto capitaneado por Julie Inkster llegaba a los encuentros de fourballs con dos puntos de desventaja respecto al de Annika Sörenstam, pero las estadounidenses sacaron a relucir todo el juego que llevan dentro en el turno de tarde del viernes para doblegar a las europeas. ¡Y de qué manera!
Ni más ni menos que un rotundo 4-0 que deja el global en un 5 ½ a 2 ½ para los locales y, lo que es peor, la sensación de que las norteamericanas pueden hacer un auténtico estropicio si huelen sangre. Y para muestra, un botón. Un resumen de unos fourballs que ya forman parte de la historia de esta competición.
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— #SolheimCup2017 ???? (@LPGA) 19 de agosto de 2017
