Tony Finau volvió a quedarse a las puertas de ganar su primer gran torneo en el PGA Tour. Si bien el estadounidense cuenta con un triunfo en el Circuito más exigente del planeta, no es menos cierto que el Puerto Rico Open de 2016 en el que se impuso, no deja de ser un torneo de los llamados menores, solo hay que fijarse en la cantidad que repartió, 3 millones de dólares, frente a los 9,3 millones del Genesis Invitational, más del triple de lo distribuido en el mencionado Puerto Rico Open.
Finau, jugador miembro del equipo estadounidense de la Ryder Cup de París 2018 es uno de esos jugadores a los que le cuesta rematar la faena, solo hay que ver los números de sus últimos cuatro años para darse cuenta de ello. Y es que a pesar de acumular más de 22 millones de dólares en premios (22,299,431) no culmina con un triunfo que le haría tocar la gloria.
El nacido en Salt Lake City de 31 años, profesional desde 2007, cuenta con ocho subcampeonatos desde 2017, diez si le añadimos el conseguido en el pasado Saudí International del European Tour y el Hero World Challenge de 2018. Tres de ellos en la temporada 2017/2018 (Safeway Open, Genesis Open y Northern Trust), dos en el curso 2018/2019 (WGC-HSBC Champions y Charles Schwab Challenge), uno en el pasado 2020 (Phoenix Open) y otros dos en la actual temporada, el Farmers Insurance Open y el Genesis Invitational, estos dos últimos de forma consecutiva.
«Crecí tratando de ganar todos los torneos que jugaba, nada ha cambiado. Sé que al final vas a perder muchas más veces de las que vas a ganar en el PGA Tour. Desafortunadamente para mí, eso me ha ocurrido mucho en los últimos años, pero siempre me desafío a mí mismo a jugar bien al golf y eso es todo lo que trato de hacer«, declaraba el estadounidense este mismo domingo tras perder en el segundo hoyo de PlayOff ante Max Homa.