Fue el mejor de esta última ronda y Carnoustie se lo supo reconocer. Quizá no estuviera al comienzo de la semana entre los favoritos al triunfo, pero conforme iban pasando los hoyos íbamos teniendo la certeza de que Francesco Molinari (65 golpes, -8) estaba ante la gran oportunidad de su carrera. Solo le hacía falta que se cumpliera el guion que diseñó ayer, en el que dejó plasmado que si el sábado era un día para atacar, el domingo también lo era para guardar las ropas e ir a lo seguro. Dicho y hecho.
El deportista transalpino, si hace un par de semanas debutaba en triunfos en el PGA Tour, esta vez lo hacía en uno de los mejores torneos del planeta para darle el primer Grande de la historia a Italia. Un país que seguía viviendo en el recuerdo de aquel PlayOff perdido por Constantino Rocca ante John Daly en el año 1995 sobre la hierba de Saint Andrews. Pero esta vez Francesco salió dispuesto a escribir la historia en primera persona.
¡Golpe de campeonato! Molinari acariciaba la Jarra de Clarete tras este gran birdie en el 72
Con un juego preciso, sin salirse de los patrones marcados a primera hora del día y aprovechando las dos ocasiones de birdie que dispuso, el golfista europeo pudo -para sorpresa de muchos- aguantarle el pulso a Tiger Woods (71 golpes, -5) en una de las partidas del domingo. Y eso que hubo ocasiones en las que pareció que se le iba el torneo, como cuando el californiano engrasaba la maquinaria para lograr dos tempraneros birdies y colocarse colíder. Pero el plan estaba yendo según lo previsto.
Nadie de los que partía en el vagón de cabeza este domingo aguantó las embestidas del complejo escocés con la excepción de Rory (70 golpes, -6), quien se aprovechó de un estratosférico putt para eagle en el 14 para darse chances de triunfo. Solo hay que ver los números de algunos de los favoritos como Jordan Spieth (76 golpes, -4) o su compatriota Xander Schauffele (74 golpes, -6) para rendirse a la evidencia de que Carnoustie tiene la fama de duro más que merecida.
Este triunfo permite a “Frankie” sumar su tercera victoria en los últimos dos meses y gozar de una oportunidad única de pelear tanto por la FedEx Cup como por la Race to Dubai, donde lleva una ventaja considerable. Asimismo, no podíamos pasar por alto felicitar a Pello Iguarán, caddie del italiano, que ha hecho que esta victoria también tenga un componente español.
Hablando de españoles Rafa Cabrera-Bello (72 golpes, +8), único integrante de la Armada el fin de semana, no ha podido terminar el torneo con una sonrisa y finalizó su participación sobre el link escocés con dos bogeys y un birdie, con lo que integra el T74.