En esto del Golf hay una máxima: cuando un jugador tiene el día le sale absolutamente todo. Da igual lo que intente y la manera en que lo haga, que los astros se alinearán para llevar su bola por el camino del éxito. Pues bien, este domingo ocurrió esto mismo con el italiano Francesco Molinari, quien no acusó en ningún momento la presión de verse líder en el National y jugó como los ángeles la última ronda.
Y prueba de ello es el excelente eagle en el par 5 del 10, logrado con un excelso putt desde prácticamente 15 metros para empezar a poner tierra de por medio en la general y con el que prepararse para recoger el título.