Hace apenas seis semanas nos hacíamos eco de unas palabras del golfista norteamericano en las que se le veía un tanto alicaído al afirmar que debía pasar por el quirófano para olvidarse por completo de las dolencias continuas en la muñeca izquierda, ésa que tantos quebraderos de cabeza le está causando en los últimos tiempos.
No hay más que tirar de hemeroteca para recordar que la lesión del jugador de 45 años se produjo en el BMW Championship de 2015–el tercer evento de los PlayOff de la FedEx Cup- o lo que es lo mismo, en la tercera semana de septiembre.
Pues bien, hace solo unas horas comparecía de nuevo ante los medios para informar de que los procesos de recuperación siguen los pasos previstos, pero que todavía no puede confirmar con exactitud el día de su vuelta. Eso sí, al menos ha dejado claro que las continuas dolencias van remitiendo poco a poco.
“Siendo sinceros, el día de mi vuelta todavía está en el aire”, confirmó el deportista a algunos periodistas al ser preguntado sobre si estaría disponible para el RBC Heritage del tercer fin de semana de abril.
¿Se perderá, pues, Jim Furyk su primera cita en el Augusta National en los últimos 12 años? Todo parece indicar que así será, pues el estadounidense ha reconocido que, aunque no se marca plazos, el mes de mayo está rodeado en rojo en su calendario. “Mayo es sin duda mi objetivo. Me gustaría adelantarlo y estar el próximo mes en el Masters, pero sé que es una tarea difícil. Aun así, todavía no está completamente descartado”, concluyó.
Grandes noticias para el jugador de Pennsylvania, que ya veía peligrar su presencia en la Ryder Cup de Minnesota. Ahora todo estará en manos del norteamericano, que tendrá tiempo para recuperar la grandísima forma que atesoraba antes de entrar en el dique seco.