Durante la tercera ronda del Sony Open en el Waialae CC de Honolulu, Ryan Palmer se sacó de la manga este espectacular golpe en el hoyo 18, par 5, desde 253 yardas (228 metros) desde una incómoda posición dejándola a poco más de un metro para más tarde convertir el putt en eagle. Fue el golpe del día en el PGA Tour.





