Ni mucho menos está descartado para participar en el fin de semana, pero todavía le queda trabajo por delante a Gonzalo Fernández-Castaño (69 golpes, -1). El golfista madrileño empezó su participación en el Wyndham Championship –el último de los eventos de la temporada regular del circuito norteamericano- como un tiro, pero fue desinflándose con el paso de las horas conforme su putt se iba mostrando esquivo en el camino al agujero. De hecho, el jugador español llegó a ocupar en algunos momentos las primeras posiciones del campeonato después de sus dos tempraneros birdies en las cuatro primeras banderas, pero hasta aquí llegaron las alegrías.
Gonzalo lo intentaba sobre la hierba del Sedgefield CC con unos números interesantes tanto de tee a calle –71 por ciento de calles cogidas- como de calle a green –66 por ciento de greenes en regulación-. Sin embargo, todo el trabajo realizado se volvía fútil en cuanto le tocaba enfrentarse a las inmediaciones de bandera, pues las oportunidades claras de birdie brillaban por su ausencia y tenía que conformarse con firmar el par. Eso sí, al menos pudo salvar la cartulina y finalizar con un golpe por debajo del par del campo después de dos vueltas completamente diferenciadas.
La primera, la que ya hemos comentado. Dos birdies en sus cuatro primeras banderas y siete pares le ponían en una situación ventajosa para atacar los nueve segundos hoyos. La segunda, la de la desconexión. Dos bogeys en el 1 y en el 3 le hacían rememorar los fantasmas de semanas pasadas. Más aún cuando tras volver a colocarse bajo par con un birdie en el 5, tornaba a cometer un fallo con su golpe de approach para quedarse nuevamente al par. Por suerte, un enorme birdie en el 9 le da muchas esperanzas de seguir los últimos 36 hoyos en Greensboro.
En cuanto a la parte de arriba de la tabla, los favoritos van labrándose con pico y pala su camino. Es el caso del estadounidense Matt Every (61 golpes, -9) y el sueco Henrik Stenson (62 golpes, -8), quienes con dos rondas con ausencia absoluta de fallos dominan las primeras horas en Carolina del Norte.