A esto si que se le puede llamar medir ¡exactamente! la distancia. Y es que James Hahn conseguía su primer Hoyo en Uno, desde que juega el PGA Tour, con un golpazo desde 141 metros con el que no tocaba el verde ya que la bola entraba directamente de vuelo a la cazoleta. Un golpe en el hoyo 11 del TPC River Highlands de Cromwell en Connecticut para el que empleó un hierro 8.