Penúltima oportunidad de los jugadores de hacerse un hueco en la postemporada de la gira americana o, dicho de otro modo, primero de los dos torneos que tendrán muchos golfistas para tratar de conseguir los puntos suficientes con los que renovar los derechos de juego de cara a la próxima temporada. El 3M Open da la bienvenida a los deportistas con la ausencia de Jorge Campillo en el apartado español, pero con la presencia de un buen número de nombres que quieren dar un golpe encima de la mesa.
Es el caso del estadounidense Jacob Bridgeman (63 golpes, -8), quien ha sorprendido a propios y a extraños este jueves con una ronda que lo ha llevado a lo más alto de la clasificación sobre la hierba del TPC Twin Cities de Blaine (Minnesota). El joven golfista nacido en Carolina del Sur, que antes del evento de esta semana ocupaba el puesto número 135 en la orden del mérito, ha tenido uno de sus mejores días sobre la hierba de un campo de golf con el que mira a todos sus competidores por el retrovisor.
El jugador de las barras y las estrellas no solo fue uno de los mejores jugadores tanto en las estadísticas de calles cogidas -tan solo marró dos– como de greenes en regulación -falló tres-, sino que se convirtió en un auténtico martilló pilón en los grenes con 1,53 golpes de media en cada uno de ellos. De esta manera, Bridgeman consiguió entregar una cartulina en la que se anotó cuatro birdies por un bogey en la primera parte del recorrido y cinco aciertos sin errores en la segunda.
Así pues, el americano se sitúa con ocho golpes por debajo del par, un impacto por encima de los guarismos presentados por el canadiense Mackenzie Hughes (64 golpes, -7) y dos más que el triunvirato de jugadores que completan el podio del torneo: Patrick Rodgers (65 golpes, -6), Andrew Novak (65 golpes, -6) y el francés Martin Trainer (65 golpes, -7).
Near perfection from @AndrewNovakGolf ? pic.twitter.com/TrvkNH9zgQ
— PGA TOUR (@PGATOUR) July 25, 2024