Jiménez, junto al eterno Colin Montgomerie, firmó la tarjeta más brillante de la sesión matinal en el Feather Sound CC con 11,5 puntos

La segunda jornada de la World Champions Cup volvió a teñirse de azul europeo gracias al inagotable Miguel Ángel Jiménez. El malagueño, junto al eterno Colin Montgomerie, firmó la tarjeta más brillante de la sesión matinal en Feather Sound Country Club con 11,5 puntos, una producción que permitió a Europa conservar el liderato pese al empuje creciente de Estados Unidos y del combinado Internacional.
Porque mientras los focos buscaban a los grandes nombres de la jornada, el veterano español volvió a ejercer como faro. Jiménez y Monty manejaron el ritmo del juego en los Six Balls matinales, con un golf maduro, fino y lleno de experiencia, ese tipo de rendimiento que parece reservado a quienes ya han vivido todas las batallas posibles. Europa cerró la mañana con una renta de 7,5 y, aunque por la tarde las tornas se igualaron; siguió defendiendo el mando del torneo con uñas, dientes… y puro temple andaluz.
Todo se resolverá en los individuales del domingo, donde se reparte la mitad de los puntos del torneo
El despertar estadounidense fue cosa de Stewart Cink y Jason Caron. La dupla firmó un total de 22,5 puntos entre mañana y tarde -incluyendo 11,5 en los Scotch Sixsomes– para situar a USA a solo 1,5 puntos del liderato. “Nos han dado vida”; admitió Jim Furyk, consciente de que el domingo será una batalla abierta.
Team USA alcanzó los 108 puntos, con Team International acechando apenas a tiro, 106,5, después de una tarde sólida que incluyó la explosión de Ángel Cabrera y K.J. Choi, impecables y sin bogeys para facturar 12 puntos.
La consistencia de Darren Clarke y Thomas Bjørn volvió a aparecer en los momentos determinantes. Por la tarde Montgomerie y el español bajaron revoluciones (7 puntos); pero mantuvieron el pulso competitivo en una sesión marcada por la puesta en escena de Bernhard Langer en sustitución de Alex Cejka.
Con Europa en 109,5, EE.UU. en 108 e Internacional en 106,5, el pulso a tres bandas se resolverá en los individuales del domingo, donde se reparte la mitad de los puntos del torneo. Antes, el ProAm del sábado dará una jornada de respiro; aunque a estas alturas la tensión competitiva ya se siente en cada declaración y en cada mirada.
Jiménez, mientras tanto, sigue sumando capítulos a una carrera sin fecha de caducidad. Y lo hace como mejor sabe; compitiendo, liderando y demostrando que, cuando hay que mantener la llama encendida; siempre queda una chispa en ese puro eterno del Pisha.
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