Visto el nivel que ha demostrado durante la semana Dustin Johnson (64 golpes, -19) podría parecer muy difícil que ni Jon Rahm (66 golpes, -13) ni nadie le discutiera el triunfo final al estadounidense, pero si algo nos ha enseñado el León de Barrika durante todo este tiempo es a no descartarlo de una pelea hasta que firma su cartulina. Y es que Jon, esta vez sí, ha continuado con la senda que marcó en las primeras horas del Tour Championship -y que se vio interrumpida abruptamente en la segunda manga- para darse opciones de convertirse en el primer miembro de la Armada en triunfar en la FedEx.
El español se anotó cuatro birdies y se libró de los errores para escalar posiciones y situarse en la cuarta plaza, a seis impactos de un norteamericano que se volvió a mostrar muy fino tanto desde el tee como en lo referido a la búsqueda de greenes. Johnson finalizó el tercer día de competición con siete birdies y tan sólo un error para situar su cartulina en -19, afianzarse en lo más alto de la tabla y mandar un mensaje muy claro a sus rivales: tendréis que arriesgar si queréis tener una mínima opción de discutir el triunfo.
Sobre todo porque a falta de una ronda par dar carpetazo definitivo al accidentado curso 2019/2020 acumula cinco impactos de ventaja sobre sus compatriotas y grandes perseguidores Xander Schauffele (67 golpes, -14) y Justin Thomas (66 golpes, -14) en un día en el que, aunque sus rivales no fallaron, el gran acierto mostrado por el número 1 mundial en las inmediaciones de bandera le sirvió para dejar el campeonato prácticamente visto para sentencia al acumular un -9 en estas tres primeras rondas y hacer valer la decena de golpes en negativo con la que arrancaba.