Será la primera vez que sea presentado en un torneo como número 1 del mundo -lástima que cuando se produzca ese momento no haya espectadores que le puedan dar la sonora ovación que merece- y, como tal, la organización del WGC-FedEx St. Jude Invitational le ha preparado un duelo a la altura de lo que la ocasión merece de cara a los primeros 36 hoyos del evento. Y es que el español, al contrario de lo que ocurrió en el Memorial -que jugó los dos primeros días alejado de los focos de los encuentros destacados- ha sido incluido en el gran duelo de jueves y viernes.
Sus compañeros de partida serán los estadounidenses Bryson DeChambeau y Rickie Fowler, dos jugadores a los que conoce sobradamente y con los que tendrá la oportunidad de batirse el cobre sobre la hierba del TPC Southwind en las primeras horas. Un duelo que no está exento de morbo, pues tendremos la ocasión de ver de nuevo en acción al científico del Golf tras su gran resbalón en Muirfield Village -perdió el corte en casa de Nicklaus cuando acumulaba una racha de siete torneos consecutivos finalizando en el Top 8 o mejor- y a Rickie Fowler intentando reponerse de sus cinco cortes en los últimos nueve eventos en uno de sus campeonatos fetiche -en los 29 WGC que ha jugado en su carrera cuenta con doce Top 10-.
Además, será la ocasión perfecta para poder ver cómo se desenvuelve Jon defendiendo el cetro mundial que tanto le ha costado conseguir. Sólo una circunstancia le puede separar de ello el próximo lunes: que Rory se alce con la victoria en Memphis. Para ello, el norirlandés se las verá los dos primeros días con Jordan Spieth y Webb Simpson en otro de los grandes duelos destacados de los dos primeros días. Brooks Koepka, Patrick Reed y la joven promesa Viktor Hovland gozarán también de atención mediática, al igual que Justin Thomas, Collin Morikawa y el japonés Hideki Matsuyama.
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