Después de una de las semanas más importantes de su vida con el nacimiento de Kepa, su primer hijo, Jon Rahm llegó al Augusta National en la tarde del martes para vivir la que será la preparación más curiosa que ha tenido nunca para la cita en Georgia. Sin embargo, ni siquiera esto le ha hecho perder la confianza de las casas de apuestas, pues el vizcaíno se sitúa en la previa del primer Major del curso como el cuarto gran favorito para enfundarse la Chaqueta Verde.
Así de claro lo tienen en los grandes mercados de Las Vegas, que ven en el español una gran apuesta para salir victorioso en la ronda del domingo toda vez que se han asegurado de que ya no va a tener que ausentarse a mitad del campeonato. De hecho, su cuota no ha hecho más que decrecer desde el último fin de semana y en estos momentos su primer triunfo en un Grande se cotiza en los trece dólares por dólar apostado, a poca distancia de Bryson DeChambeau y Jordan Spieth –12 a 1– y un poco más lejos de un Dustin Johnson –10 a 1– que aparece como el gran favorito para revalidar el título.
Es precisamente en esta terna donde nos encontramos la gran variación de la semana, pues la victoria de Spieth en el Valero Texas Open -unido a su buen historial en el célebre complejo de Georgia- ha provocado que sus acciones suban como la espuma hasta situarse como el segundo gran favorito a llevarse a casa el título. Por lo que respecta a Sergio García, el segundo de los tres jugadores de la Armada que se darán cita esta semana, su segunda Chaqueta Verde se paga a 51 dólares por dólar apostado. En el caso del doble campeón José María Olazábal, los 4001 dólares por dólar apostado lo dicen todo.