Podríamos pensar que, tras la tragedia vivida en la última ronda del torneo olímpico, Jon Rahm (62 golpes, -14) iba a tener que pasar el luto psicológico durante las siguientes semanas. Pero eso significaría que conocemos muy poco al León de Barrika. Este, en lugar de lamentarse por la oportunidad perdida, ha hecho de la rabia su mejor virtud y quiere ganar su segundo torneo consecutivo en la LIV Golf League. Un triunfo que le dejaría muy cerca del objetivo de llevarse el título individual en apenas un mes en Chicago.
Para que esto suceda, el español deberá defender este domingo con uñas y dientes los dos impactos que tiene de margen sobre el cuarteto que integran Brooks Koepka (64 golpes, -12), Talor Gooch (65 golpes, -12), Richard Bland (64 golpes, -12) y Lucas Herbert (63 golpes, -12). Una ventaja labrada a fuego lento, pues no fue hasta la segunda parte del recorrido cuando el golfista vizcaíno se disparó en la clasificación con seis birdies y un eagle sin fallos en las diez banderas finales.
Antes de esto, el jugador vasco había sellado con un acierto y un error las siete primeras banderas. Una grandísima vuelta que dio como resultado que estos momentos sea el gran favorito al triunfo final sobre la hierba del The Old White at The Greenbrier. Eso sí, esta no ha sido la única gran actuación de un miembro de la Armada en la segunda manga del LIV Golf Greenbrier. Sergio García (63 golpes, -10) se ha ganado un lugar en las diez primeras posiciones tras una segunda ronda en la que ha finalizado con siete birdies sin fallos para colocarse con dobles dígitos en negativo.
Una situación que también ha experimentado David Puig (65 golpes, -7), quien se ha subido al Top 17 de la prueba. En el caso de Eugenio López-Chacarra (66 golpes, -6), último miembro español, también ha conseguido ganarle la partida al campo para colocarse en el Top 20.
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— LIV Golf (@livgolf_league) August 17, 2024