Semana mala, en términos generales, para los nuestros en la clasificación mundial. Y es que, tras la disputa del Masters de Augusta, los cuatro integrantes de la Armada con los que contamos en el Top 100 han retrocedido puestos con la única excepción de Jon Rahm. El vizcaíno, que finalizó en un meritorio séptimo lugar sobre la hierba del Augusta National, se mantiene en la segunda posición de la tabla pero, eso sí, se distancia a algo menos de medio punto con respecto a un Dustin Johnson al que no terminó de cazar cuando más cerca lo tenía.
Y es que el estadounidense, después de estar apartado varias semanas de la competición como consecuencia del COVID-19, sumó un subcampeonato en el Houston Open y un extraordinario triunfo en Augusta para retener el cetro de mejor jugador del planeta con una suficiencia que nos invita a pensar que su hegemonía se extenderá en el tiempo. No obstante, Jon puede estar orgulloso de su actuación y a la vista está que ha abierto un cómodo colchón de casi un punto con respecto a Justin Thomas, tercer clasificado, y casi tres sobre Rory, quien se encuentra fuera del podio.
Lamentablemente, las noticias no son tan positivas cuando visitamos a los otros tres españoles inmersos en la primera página del ranking. Empezando por Sergio García, al que su no participación en el Masters por culpa de su positivo por COVID-19 le ha provocado un descenso de una plaza con respecto al Top 40 que mantenía hace siete días. Como una plaza bajan también Rafa Cabrera (89º), a quien, pese a avanzar al fin de semana del último Major del 2020, el Top 51 se le quedó escaso para ganar algún puesto, y Jorge Campillo, que cierra las cien primeras posiciones.
En cuanto a la subida más pronunciada de la Armada tenemos que hablar sin ningún género de dudas de Pep Anglés, al que su triunfo en el Andalucía Challenge de Cádiz le ha permitido colocarse en el Top 254 y convertirse en el octavo mejor español de la clasificación mundial.