Poco se había fijado el PGA Tour en Jon Rahm en lo que ha golpes grabados se refiere al menos en las dos primeras rondas del BMW Championship, vueltas en las que no conseguía restar golpes al campo. Sin embargo el fin de semana, y concretamente en la tercera, fue otro cantar ya que el de Barrika se marchaba del Olympia Fields con una tarjeta en la que anotaba un gran 66, con penalización incluida, en la que nos encontrábamos golpazos como el dado en el hoyo 8 donde a punto estuvo de anotar el Hoyo en Uno desde 215 metros.