Día de emociones fuertes en el Farmers Insurance Open, sobre todo para un Jon Rahm (69 golpes, -3) que, después de la retirada de última hora del torneo de la pasada semana, se ha tenido que poner el mono de faena desde bien temprano para no despegarse de las primeras posiciones del evento. Y eso que no lo tuvo nada fácil pues, a pesar de haber iniciado con maestría unas primeras banderas en las que cosechó tres birdies en los cuatro primeros intentos -el único que no consiguió, el del hoyo 1, se le escapó por un palmo-, pronto tuvo que enfrentarse cara a cara con Torrey Pines.
Así, en este campo sur, el vizcaíno fue intercalando aciertos y errores a partir de la quinta bandera –bogeys al 5 y al 7 y birdies al 6 y al 8-, lo que le costó detenerse en seco en la tabla y no poder culminar una progresión que tenía visos de elevarlo a lo más alto. La segunda parte del recorrido tampoco dio mucho más de sí, pues el remanso de paz en el que se habían convertido los nueve hoyos finales tan sólo fue interrumpido por un birdie en el 14 y un bogey en el 17, lo que le acabó colocando finalmente en el Top 32.
Desde aquí, JR se situó a sólo tres impactos de la sexta posición del campeonato y a cuatro de un podio que integran en estas primeras horas Scottie Scheffler (65 golpes, -7), el sueco Alex Noren (64 golpes, -8) y Patrick Reed (64 golpes, -8), que ha completado un día de mucho éxito en el campo norte después de haber acumulado ocho birdies sin errores para subirse a lo más alto y darle esperanzas de volver a una senda del triunfo que no visita desde hace casi un año -su última victoria data del WGC-México de febrero del año pasado-.
Jon, ya recuperado totalmente de las dolencias que le hicieron perderse el torneo de la pasada semana en La Quinta, pondrá este viernes toda la carne en el asador para dejarse una oportunidad de éxito en un evento que significa mucho para él y, además, en el que ha logrado grandes resultados a lo largo de su carrera.