En un torneo con solo medio centenar de jugadores y con los guarismos tan apretados, el mínimo fallo se paga bien caro. Y si no que se lo digan a Jon Rahm (72 golpes, Par), que en apenas unos minutos transformó una ronda en la que acumulaba un par de golpes por debajo del par y en la que se situaba a rebufo de los diez primeros puestos en una vuelta al Par del campo con la que se aleja a tres impactos de la zona noble de la clasificación.
Todo ello después de dos banderas finales en las que el León de Barrika se vio obligado a claudicar con dos bogeys consecutivos tras una salida al bunker en el 17 y un segundo golpe al agua en el 18. Un Top 24 que emborrona un poco un día que, sin ser especialmente provechoso para el vizcaíno en términos de aciertos, había conseguido salirse con la suya para presentar tres aciertos y un solitario error antes de la llegada de la etapa final de su vuelta.
Posición con la que se sitúa a un impacto de Adrián Otaegui (71 golpes, -1), que puede presumir de ser el mejor español después de los 18 primeros hoyos en el DP World Tour Championship dubaití tras ser el único en entregar una cartulina con guarismos en negativo. El guipuzcoano también erró en la última bandera, pero los tres birdies y el bogey cosechados hasta ese momento lo colocan a cuatro impactos de los tres jugadores que comparten el coliderato del torneo: Julien Guerrier (67 golpes, -5), Matthieu Pavon (67 golpes, -5) y Nicolai Hojgaard (67 golpes, -5).
Del resto de la actuación española, Jorge Campillo (72 golpes, Par) y Pablo Larrazábal (72 golpes, Par) ocupan junto al León de Barrika el Top 24 de la prueba -el cacereño deberá mejorar si no quiere pasar apuros para lograr una de las últimas tarjetas del PGA Tour-, mientras que Nacho Elvira (77 golpes, +5) cierra la clasificación tras seis bogeys y un birdie.
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— DP World Tour (@DPWorldTour) November 16, 2023