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Los dos compañeros de Ryder Cup han protagonizado la gran variación de la semana en la clasificación global. Foto: @USGA
Todo apuntaba a un domingo propicio para los intereses de la Armada de cara a la ronda final del US Open. Sin embargo, Jon Rahm no pudo sacar a flote un barco que comenzó a hundirse en los nueve primeros hoyos con esos dos errores sin aciertos y que acabó sucumbiendo al intrincado recorrido planteado por la USGA para The Country Club. De hecho, el León de Barrika acabó sumando en los 18 hoyos finales su única vuelta por encima del par del campo, lo que le acabó dejando sin opciones de revalidar con éxito el título conseguido hace un año en Torrey Pines.
Un descenso al Top 12 que, como cabría esperar a tenor de la igualdad vivida, ha tenido consecuencias en relación con el ranking mundial. Y es que el puesto firmado por el deportista vasco en Brookline le ha hecho perder una plaza en detrimento de un Rory McIlroy al que su Top 5 en el tercer Grande del año le ha venido aparejado un ascenso en la clasificación global. Así pues, el norirlandés aventaja en poco más de una décima al jugador español y se sitúa a algo más de tres puntos de un Scottie Scheffler al que el subcampeonato le hace tomar más consistencia si cabe como número 1.
También han experimentado cambios en la zona alta tanto Morikawa como el ganador Matt Fitzpatrick, quienes aprovecharon sus imponentes actuaciones durante el fin de semana para ascender a la cuarta y décima plaza, respectivamente. Todo ello en una semana en la que el resto de expedición que la Armada llevó a las afueras de Boston se quedó sin opciones de estar en las dos últimas rondas. Así pues, Adri Arnaus perdió tres puestos hasta situarse en el Top 56 y Sergio García perdió cuatro y pasa a ocupar el Top 60.
A Pablo Larrazábal, que no participó en la prueba organizada por la USGA, le sonrió el divisor y sube un puesto con el que se sitúa en el Top 70 en unas últimas horas en las que la gran alegría en términos de clasificación la han experimentado tanto Borja Virto como Dani Berná, que con un Top 8 en el Kaskáda Golf Challenge de la división de plata del DPWT y con un Top 3 en el Aravell Golf Open del Alps, respectivamente, ascienden al T860 y al T978.
