Cierto es que Jon Rahm no mostró su mejor golf en la segunda jornada del WGC-Workday Championship como así lo atestiguan sus ocho golpes de diferencia con respecto al día anterior. No obstante el de Barrika tuvo destellos de gran juego como el golpazo dado desde uno de los bunkers del hoyo 3 con el que dejaba la bola dada contrarrestando uno de los errores cometidos por el español.