El golfista vizcaíno Jon Rahm llega en el quinto puesto de la clasificación del PGA Tour (FedEx Cup) a la segunda final de los tres PlayOff del circuito estadounidense, que se disputa esta semana en el Medinah Country Club, en las afueras de Chicago.
“Son tres años seguidos llegando a Atlanta (Tour Championship), tres años seguidos jugando los PlayOff y tres años seguidos ganando en el PGA Tour”, recordó Rahm sobre sus fulgurantes tres temporadas en el circuito estadounidense, que acabó en el quinto puesto en 2017 y en el vigésimo tercero en 2018.
“Son semanas duras, porque juegas mucho en verano y al final es un último empujón. Muchas veces el que acaba ganando el último torneo no es el que está arriba en la Fedex Cup, y esto se debe al cansancio básicamente”, explicó el golfista de Barrika. “A veces el que está líder tiene mucha presión y tiene que acabar fuerte”, agregó.
En su estreno en las finales del PGA Tour en 2017, “Rahmbo” superó las expectativas y llegó a aspirar al gran premio. “No me esperaba llegar a Atlanta entre los cinco primeros. Terminar tercero, cuarto y quinto en los últimos tres PlayOff fue muy bueno también”, dijo el también número cinco del ránking mundial.
“Los PlayOff es un empujón único porque cada torneo cuenta tanto. Creo que todos llegamos un poco cansados y es importante empezar bien para darte una opción de victoria”, señaló Jon Rahm, que llegó a ponerse líder en la primera final de la semana pasada en Nueva Jersey y acabó empatado en el tercer puesto, a dos golpes del ganador, el estadounidense Patrick Reed.
“Estoy harto de darme opciones de ganar y no ganar. El entrenamiento que llevo para mejorar como jugador y como persona me ayuda a mantener las reacciones bajo control. He notado un cambio muy grande este año y poco a poco me tengo que acostumbrar”, dijo el vasco sobre el manejo del temperamento y la frustración.
“Estoy intentando encontrar el equilibrio entre todo. Ha sido un buen año y voy mejorando poco a poco”, explicó Jon Rahm acerca de su trabajo físico y mental. En el equilibrio al que aspira entra también la gestión de la energía.
“La concepción que yo tenía al principio es que entrenas, das bolas, juegas 18 hoyos y vuelves a entrenar, patear. La idea de que los jugadores del tour no hacen más que entrenar es una gran mentira”, comentó el golfista vizcaíno acerca de la mejor manera de dosificar la energía.
“Poco a poco voy aprendiendo que no tengo que dar bolas, ni estar pateando o gastando energía todo el día. Es mejor estar mentalmente fresco, que pegar tres bolas de más para arreglar el swing”, explicó Rahm, que se ha dado cuenta de que “si te pasas un poco de rosca se vuelve bastante duro para tu cuerpo y tu mente”.
Después del cambio instaurado esta temporada de cuatro finales a tres, esta semana del BMW Championship marca el ecuador del sprint hacia la codiciada Fedex Cup y los 15 millones de dólares de premio que la acompañan.
“Prefiero que sean tres semanas”, dijo el golfista de Barrika. “La semana pasada era importantísima para no estar muy lejos del líder. Lo que tenía en mente era acercarme al primero lo máximo posible para tener opciones en la final”, agregó Jon Rahm, que va cumpliendo su plan.
El otro español en el BMW Championship, después de la eliminación del castellonense Sergio García en el Northern Trust, es el grancanario Rafa Cabrera Bello, que se encuentra en el puesto 67 de la FedEx, alejado de los cinco primeros, Jon Rahm (5), el norilandés Rory McIlroy (3), y los estadounidenses Matt Kuchar (4), Patrick Reed (2) y Brooks Koepka (1).
Cabrera Bello necesita ganar o terminar entre los tres primeros en el BMW Championship para formar parte del selecto grupo de 30 golfistas que jugarán la próxima semana el Tour Championship, el último torneo de la temporada en el histórico recorrido de East Lake, en Atlanta.